lunes, 2 de mayo de 2011

Andorinha

Y en la habitación contigua no había nada, o al menos nada de ti ni de tus colores. El corredor infinito se embargó de susurros largos y grises danzando al ritmo de tus pupilas. Buscaron tropezar con muros planos para ser reformados (reafirmados), sólo para ser reformados en esta realidad de opacos que es tu piel. Lo sé, te empujaron los pliegues infames de masa encefálica: formas solitarias y complejas que asaltan la solidez del suelo y de tus dedos temblorosos y mojados.

Las agujas intimidan, pero transportan. Afiladas y tristes te esperan. El vació, colores.

Si pudieras imaginar esos contrastes ligeros, que vuelan sin ser, sin ti. Si pudieras, créeme. Silencio. Súbito zumbido al azotarse la puerta. Esperas. Se alarga y sabes que esa molestia ya forma parte del proceso de los colores. Cien filamentos rozan tu piel. Delgada y profunda forma líneas negras: rectas y curvas. Luego, el color.

La molestia recorre los pasajes más inhabitados de tus recuerdos. ¿Dónde está?. No lo encuentras, porque no sabes qué es, hasta ahora que lo sientes hirviendo en ti, dentro. Observas a ese hombre de guantes negros que intenta conversar, sin embargo no estás ahí para eso, sólo piensas en el dolor sin dolor y en el pedazo de ti que se ilumina, simplemente colores.

Cada momento que no está ahí, penetrando tu ser cutáneo lo piensas: "No puede existir una sensación parecida a esta". Sin embargo no chorrea, queda en cada muro húmedo hasta llegar a tus pies. Y el suelo se hizo tinta y caíste hasta el fondo. En alguna esquina de tu cuerpo una golondrina azul vuela.

martes, 14 de diciembre de 2010

Lloviendo seco


Y en el cielo se vislumbraba el bello, cálido, anaranjado atardecer, el cual guardaba un secreto que no quería contar. Ella en la cama, con la cabeza torcida sobre la almohada y sus ojos roble, tan brillantes como siempre, observaba perdidamente todo el panorama, como si lo que buscaba se escondiera entre esos matices.

Esa mañana regresaba de una excursión. La recuerdo bien: ¿cómo olvidar esa brisa tan refrescante fundiéndose sobre el pasto y la tierra ya muy húmeda?
Parecía decirme algo que había ignorado durante mucho tiempo. Llegué a casa y subí las escaleras, un poco desganado, cansado. Saqué la fría llave de la bolsa del pantalón muy sucio, y sabiendo de memoria como un ritual que debe ser cumplido abrí la puerta y esta rechinó de una forma poco usual para cualquiera. Siempre que la abro parece que no está de acuerdo con algo y expresa un quejumbroso argumento.
Retiré mi camisa liberándome de tanta humedad, y justo en ese momento sonó el teléfono. Bastó con que sonara dos veces y logré alcanzarlo.
-¿Sí, diga?
-¡Hola, soy yo!
Esa voz es siempre como la espuma del mar perdiéndose entre el sonido infinito de las olas. Por supuesto era Zara, con una terrible espontaneidad.
-¡Ah! Hola Zara, ¿qué ha pasado de nuevo contigo?
-¿Sabes? He pensado mucho en ti últimamente, no nos hemos visto en algún tiempo, y me haces falta.
No sabía qué responder, me distraje cuando con el rabo del ojo vi que la ropa se mojaba afuera gracias a un cambio brusco en el clima, y la brisa repentina; me hacía recordar buenos ratos con ella.
-¡Hey!
-Perdón, ¿qué me decías?
Después de todo, ya está húmeda la ropa, para qué mojarme yo también.
-Te decía que he pensado mucho en ti
-Yo también. ¿Qué te parece si por la tarde vamos a ese café al que tanto te gusta ir?
-Me parece buena idea, nos vemos ahí a las seis.

Colgué rápidamente, y como si mi vida dependiese de ello, corrí hacia el patio y claro, me empapé. Tomé toda la ropa. Aunque ya estaba mojada, la metí a la casa.

Zara y yo no nos frecuentábamos, sólo en muy determinada ocasión para hablar: sólo para eso. Recuerdo que ella, a pesar de todos sus problemas por resolver, tenía esa bella sonrisa que mostraba sus blanquísimos dientes. En su mirada se notaba siempre cansancio, tal vez tristeza o angustia. Nunca pude averiguar qué me quería decir con esa mirada intrigante, y esa sensación prevalece.
Nos conocimos en la secundaria, era un año mayor. Ella era como un enorme imán para mí, me gustaba. Aparte de nuestra amistad creo que siempre lo había sospechado, hasta que un día me decidí con estúpidas esperanzas y le dije lo que sentía. Ella sólo dijo:
-Tú también me gustas, es tu amistad lo que me importa
Para mí todo estaba perdido.

Fuimos al café de siempre y nos sentamos en la mesa de siempre, y claro, eramos los viejos amigos de siempre. La llevé a su casa, seguía lloviendo y sus hermosos cabellos largos y húmedos le caían sobre los hombros descubiertos. Le presté mi chamarra. Sus blancas manos estaban congeladas y no sabía dónde meterlas para calentarlas un poco. Se despidió de mí con un cálido abrazo y entró corriendo a su casa.
Desde entonces no la he vuelto a ver, y fue como si se hubiera difuminado todos los recuerdos, como si la lluvia se lo hubiera llevado todo, se perdieron las líneas y límites oscuros de lo que pasó y lo que no, su presencia tan cálida, rígida y hermosa. Todo en mi cabeza.

Entre tanto recordar esos fragmentos de los cruces de nuestras vidas, un segundo me regresa a la realidad, la razón por la que ya no la sentía. Y pienso: "sabes que esto no volverá a pasar, no se repetirá. Tus momentos junto a ella, la lluvia, todo eso dejó de existir en el momento que ella lo decidió". Y mi inconsciente sigue pensando en que nos veremos en aquel café; sigo imaginándola como aquel día, empapada...con su hermosa sonrisa y sus manos adormecidas por el frío. Me pasa frecuentemente, pero siempre en un parpadear me reencuentro con la realidad, y lastima.

Después de todo ya estaba muerta, ¿por qué no hacerlo yo también?


viernes, 10 de diciembre de 2010

Si recordaste la mugre en las uñas y el olor a cigarro
Si hallaste el perezoso sabor de la dulce saliva en los labios fugaces
Si te lastima el recuerdo y las notas matutinas en los tímpanos
Si, si y si...
Si yo, y si tú.
Si eso sucede, sí que estamos jodidos.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Hablando de debrayes... :)

-¿Quién eres?

En tu habitación sabes que no hay nada qué perder. Las paredes son familiares y pareciera que tu olor está en todas partes. Recuerdas y recuerdas. La volteas a ver y te preguntas una vez más, ahogando la duda que jamás se responderá "¿Por qué?". Ella llora, y no sabes qué hacer.


Ayúdale, que se hace tarde y la noche te abruma. La última vez no estuvo tan mal. Y la vuelves a recordar.
Los grillos saltan de un lado a otro susurrándote un "ven aquí". Te buscas, pero aún no te das cuenta de que jamás te vas a encontrar, ni en aquella hojarasca del otoño pasado, ni en las células de su piel.


-No lo sé



Abre los poros y busca refugio, si no lo encuentras, corre y sigue el camino blando que te lleva ahí, tu sabes dónde. Tu bien sabes que el buen indicio que haya entre las plantas de tus pies y la tierra es la falsa consecuencia del ayer, ayer, ayer...



-No corras, vete, ¡ven!
-No
-...



Escóndete en la brisa y juega a que eres Dios. Escupe la mierda que hace años entró por tus oídos, por tus uñas, ojos y piel. Recuerda la torpeza de tus frases saliendo de tu garganta hacia el vacío hondo y sucio de las hormigas, escarabajos y gusanos. Sales, y en un movimiento agonizante explotan tus pupilas y todo sale de órbita, de los meridianos justos y sencillos que son tu ser. Nunca volverás a ser el mismo, la misma, el y la, tú y yo, él y ella, ustedes.


-¿Eres?
-Soy... ¿soy?
-Te quieres ir, ¿verdad?

Silencio, no podrás. Quieres y no. Tus dedos comienzan a jugar el papel del "yo no sé" haciendo movimientos absurdos. La pregunta te hace más pesado y pesada, más y más y más...
Crees caer de nuevo, pero la brisa te vuelve a sostener. Juega los papeles encomendados estos días, jamás remunerados. Creo que lo sabes, muy bien que te quieres ir. No juegues, aunque sea tu fuerte y lo que te mantiene comiendo la tierra húmeda que nadie pisó jamás. Ellos no lo sabrán. Comen tu carne amorfa y la huelen y beben tus fluidos intoxicados de ya sabes qué.

-No puedo
-¿Por qué?
-...


Y si la noche no se hubiera acabado, y en el instante justo en que la lágrima cayó no hubiera estado la sábana blanca, hubieras querido irte para que ella volviera. El hecho es que no. No puedes irte, no puede volver. No puedes. Él y ella, tú y yo, ustedes. Ella.

lunes, 11 de octubre de 2010

PIES MOJADOS



"Algunas veces los recuerdos sonríen, lloran, carcajean, sufren, y otras tantas empapan.."

Y mis pies siguieron una sutil línea de cigarrillo. En ese entonces, era como si ellos mismos fueran mis ojos, mi nariz, y mis manos. No tenía control sobre ellos, pero ellos sobre mí sí. Caminé, troté, corrí durante un tiempo parecido a la caída de la última hoja de otoño donde el viento juega con ella y la abraza hasta que caen, finalmente, en brazos del otro. Lejanas melodías se acercan a mí con cada paso que doy. Las he escuchado en algún lugar, estoy segura de eso, pero, ¿en dónde?, ¿en el trabajo, ¿en casa de mis padres?, o tal vez, en alguna ventana abierta por donde suelo caminar en las mañanas. Ya no siento las corrientes de aire en mi cara, creo que ha parado la caminata. Recuerdos, recuerdos, recuerdos por doquier. Es como un carrusel. Con cada nueva vuelta, una nueva imagen aparece. Una gota resbala por mi frente hasta formarse una solitaria lagrimilla recorriendo mi pálida mejilla y dejando su marca en mi piel. Mis pies se sienten mojados de una lluvia de memorias...

Dedicado a Karla Juliana Carreón Tapia
por Gabriela Solis Gómez

miércoles, 11 de agosto de 2010

Ella empezó a carecer de inspiración, y tuvo que parar de imaginar espirales tornasoladas, y de convertir palabras en poesía y cuentos cortos. Pero está a punto de publicar algo muy pronto... :)

martes, 23 de marzo de 2010

El sueño de Luisa

Si Luisa no hubiese escuchado el rechinoso sonido de la puerta de la alcoba al abrirse, sus sueños hubieran seguido su rumbo hacia la nada...
- Luisa...
Una leve pausa hace que el silencio del lugar se vuelva más evidente
-¿Sabes qué día es hoy?
Entreabriendo un ojo Luisa observa a su madre con síntomas de extremo cansancio. Con una voz rasposa finalmente contesta:
-Supongo que martes
-Te la has pasado durmiendo toda la semana, ¿no estás cansada ya de esto?
La voz de su madre parecía hacer retumbar la tierra haciendo a Luisa reincorporarse nuevamente al mundo de los no- sueños
-Pero mamá, estoy muy cansada, de verdad
-Tienes que ir a la escuela, ya no puedo con esto. Por favor Luisa, despierta ya del sueño en el que estás
Luisa al ver el rostro tan claro y limpio de su madre viéndola con tanta preocupación al saber que su hija no quería despertar de ese sueño interminable, se levantó, y como si fuera la primera vez en muchos años la abrazó.
Ese abrazo parecía no tener fin para Luisa. Su alma se dividió y se contrajo en una milésima de su tamaño, o por lo menos, eso fue lo que ella sintió. Las lágrimas no paraban de salir de sus ojos ya cansados e inchados. Los soles y las lunas la vieron varias veces llorar, pero esta vez era diferente...pronto todo iba a terminar.
-Sabes que voy a estar aquí siempre, o no?
Luisa vió a su madre a los ojos, y por primera vez en mucho tiempo se sintió en paz.
Despertó del sueño al otro día en su cama. Nunca más lo volvió a soñar, nunca más se volvió a cansar de soñar.

viernes, 6 de noviembre de 2009

[Sin título]

Ahora estoy donde mi mente nunca viajó,

Y ni los carros ni las luces me han hecho olvidar.

Mis pasos bajo el sol marcan la llegada

de lo que antes nunca llegó.

Y yo esperaba y esperaba viajar

a aquel horizonte lleno de algo que nunca podré olvidar.

He recorrido todos esos lugares en mi memoria,

lugares donde una parte de mi ser sucumbió,

lugares donde el cuento no terminó.

Sé que será retomado cuando el tiempo haga su labor,

Pero mientras tanto mi otro yo está volando por donde nunca voló.

jueves, 1 de octubre de 2009

Her morning elegance = D

Una canción que probablemente nadie de los que la escuchen aquí la conocen. Me enamoré tanto de la canción como del "Stop motion".




Sun been down for days
A pretty flower in a vase
A slipper by the fireplace
A cello lying in its case

Soon she's down the stairs
Her morning elegance she wears
The sound of water makes her dream
Awoken by a cloud of steam
She pours a daydream in a cup
A spoon of sugar sweetens up

And She fights for her life
As she puts on her coat
And she fights for her life on the train
She looks at the rain
As it pours
And she fights for her life
As she goes in a store
With a thought she has caught
By a thread
She pays for the bread
And She goes...
Nobody knows

Sun been down for days
A winter melody she plays
The thunder makes her contemplate
She hears a noise behind the gate
Perhaps a letter with a dove
Perhaps a stranger she could love

And She fights for her life
As she puts on her coat
And she fights for her life on the train
She looks at the rain
As it pours
And she fights for her life
As she goes in a store
With a thought she has caught
By a thread
She pays for the bread
And She goes...
Nobody knows

And She fights for her life
As she puts on her coat
And she fights for her life on the train
She looks at the rain
As it pours
And she fights for her life
Where people are pleasently strange
And counting the change
And She goes...
Nobody knows

lunes, 24 de agosto de 2009

Imoprtancia de ser



Importancia de ser,

carencia de estar.


Mezclas espiraladas de tormentas,

donde para ser felíz,

no necesitas vivir,

sonreírle a los fantasmas materiales.


Contexto intoxicado,

dañado,

tan lleno de nada,

vacío de todo.


El brillo de los ojos de la bondad se difuminó,

ante el vaivén de exterminios de vida,

plasmados solo en recuerdos,

de masas afligidas.
Fotografía: Niños (de la serie Paquistán) Peter Rodger

A veces es bueno...

Ahora soy irreal,
sí, como escuchaste.
Mi mente está atrapada en una espiral multicolor
La secuela de tu ausencia lo hizo,
entre espasmos y calambres del corazón.
Mis pies no llegan a tocar las piedras que en el suelo pernoctan,
tras un día de estar tan rígidas, suaves.
Yo, entre pastizales,
como sangrando colores vivos,
los colores de tu huída, sigilosa.
Me dueles y nos dolemos.
Esta metamorfósis de vida cada vez nos duele más.
En el caudal que descansa mi inconsciente,
empieza su evolución.
Mis pies van desapareciendo,
no caminaré.
No porque no quiera,
sino porque a veces es bueno volar.

La puerta


Y entraste por la puerta trasera de mi corazón, mientras yo estaba incompleta. Entre los espasmos de soledad, y entre la necesidad de piel. Sí, entraste por la puerta trasera de mis pupilas, en una tarde de sol y espirales animadas.
Por la puerta trasera entraste, y por la misma puerta saldrás.

miércoles, 10 de junio de 2009

Este vídeo me lo pasó un amigo y me gustó mucho!!!

...Ghost figures of past, present, future haunting the heart...

lunes, 8 de junio de 2009

Use somebody Kings of Leon

I've been roaming aroundi was looking down at all i seepainting faces, building places i can't reachyou know that i could use somebodyyou know that i could use somebodysomeone like youand all you knowand how you speakcountless lovers undercover of the streetyou know that i could use somebodyyou know that i could use somebodysomeone like youoff in the night,why'd you live it up?-i'm off to sleepwaging warto shake the cold---i hope it's going to make you noticei hope it's going to make you noticesomeone like mesomeone like mesomeone like mesomebody someone like yousomebodysomeone like yousomebodysomeone like yousomebodyi've been running aroundi was looking down at all i see

фотографии для тебя Ilya

El tiempo no me quiere esperar


Pero prefiero seguir aquí, jugando
con tus cabellos en la oscuridad



Y no enterarme de nada de lo que pasa afuera de la habitación


Volver a vivir en tu boca y dormir en tus ojos
Buscar la sombra de tus olores
Explorar en tu cuello cálido
las notas de tus fantasías
hasta que el tiempo me vuelva a despertar
de este sueño tan profundo como la noche
tan tibio como tu espalda
tan cómodo como tus brazos.
No será lejano aquel día...







viernes, 5 de junio de 2009

Más fotos!...для Ilya

El sentimiento que más duele, el que más quema, el que más mata...es el olvido.

















martes, 2 de junio de 2009

Galería: Fragmentos y momentos

Fragmentos de mi vida, congelados. Tal vez olvidados








































Уже мы виделись в глаза



Y sus ojos viajaban a un lugar desconocido
cuando la luna se reflejaba en ellos,
esa luna siempre parecía pertenecerle
a el y a su propio cielo.


A ella le bailan los cabellos sobre los hombros
juegan con su espalda blanca
y cuentan al viento sus secretos.


Ella cambia mechones de pelo por el brillo de los ojos de aquel hombre nocturno
Ella busca la luna en el cielo, para encontrar dónde se reflejaron ayer
Ella no sabe si sus miradas se cruzarán un día
Pero busca la manera de imaginarselo
mientras el rueda y rueda sobre una bicicleta
desde el otro lado del mundo.

viernes, 1 de mayo de 2009

Cierra la puerta detrás de ti
provoca que retumben mis oídos al saber que te vas
y olvidate de los revoloteos de las mariposas que dejaste atrás
junto a mi.
Olvidate de la luz del alba en otoño
de la música
de los besos
los abrazos
los sueños
mis ojos.
Olvidate de todo lo que no fue nada
y de lo que es tambien.
Vivir es mejor cuando uno realmente no sabe
nada.

lunes, 6 de abril de 2009

Mujer de papel



Ella era una mujer hecha de papel

bailaba y bailaba al ritmo del violento compás del viento

jugaba con las cosas transparentes

y soñaba con las suaves caricias de las hojas en su aliento


Un día decidió probar los embriagantes sinsabores del amor

nunca pensó que podía haber mucho dolor.

Con el simple hecho de tocar las manos de un hombre hecho de navajas

se dió cuenta de que poco a poco se desprendían pedazos de su vida

y caían en el oscuro pozo de as mentiras hechas de inmundicia

que penetraban suavemente sus claras pupilas,

hacían que todo su juego de pasión cayeran en la desdicha

de saber que a veces la ternura no alcanza

para las frías noches en que ese hombre la abraza.






martes, 24 de febrero de 2009

Búsqueda y encuentro


Lucía busca en su habitación aquella blusa blanca que solía gustarle tanto. El sol se filtra por el nítido vidrio de la ventana formando pequeño aces de dorada luz iluminando la estancia y el blanco piso busca un poco del reflejo de la realidad que mora sobre él. En la casa vacía no existe sonido alguno que pueda perturbar la tranquilidad difuminada. Lucía saca y saca la ropa de todo su armario y cajones. Al fin la encuentra arrugada debajo de todo, agotada y triste. Constantemente parece que las paredes regresan un eco extraño y vacío por cada movimiento que de ella se desprende. Parece ser que está sola otra vez. Lucía quiere saber por qué, pero sabe que no hayará respuesta entre esas blancas paredes, ni entre esos ecos sin nombre, y tampoco entre sus ropas tiradas en toda la habitación. Lucía baja la cabeza hacia el suelo blanco y limpio. El azulejo blanco ha encontrado la realidad, y Lucía ha encontrado por fin lo que es la soledad.

jueves, 15 de enero de 2009

¿Y qué vamos a hacer?

¿Y qué vamos a hacer
cuando nos quedemos encerrados en los recuerdos
y se agoten los soles y lunas de la espera fría?
¿Dime qué vamos a hacer
cuando los aromas invadan nuestras risas
y lágrima por lágrima nos abandonen las caricias?
¿Dime por favor qué voy a hacer
cuando recuerde tu compañía
y aquellas tardes en que las miradas se perdían?
¿qué vas a hacer
si un día buscas tomar alguna mano tibia
enmedio de tormentas de momentos
y el mundo te comprima lento
en el techo de tu suelo
en las tardes de sueño
en el olor de tu pelo
en la sombra del cielo
y en las noches
de encierros
lentos y
secos
...

domingo, 16 de noviembre de 2008


"...You gave me three cigarettes to smoke my tears..."